Con el derribo de casas, transformación de calles históricas y demás no debe ser suficiente. Ahora resulta que se han propuesto profanar una tumba colectiva en Dublín donde descansan restos de muchos participantes republicanos ejecutados por los británicos tras la revuelta de 1798.
Cientos de cuerpos descansan entre el rio Liffy y el Museo Nacional, en un memorial que se denomina "Croppy Acre". Ahora las autoridades pro-británicas se han propuesto realizar obras profanando así su lugar de descanso.
A mediados de este mes, tras unas maquinas entrar en la campa, Republicanos de Dublín (entre ellos miembros del Republican Sinn Féin y el 32CSM entre otros, se interpusieron en sus "trabajos" en defensa de este simbólico lugar y de los muertos que ahí descansan.
- Protesta Irlandesa contra la policía británica y sus políticas represivas en Derry
En Derry, a principios de mes se realizo una movilización contra los actos de propaganda llevados acabo por la policía colonial británica en los 6 Condados directamente ocupados por los británicos.
Tras una concentración, parte de los participantes marcho a través de la ciudad hasta un lugar donde estaba teniendo un evento de propaganda- reclutamiento de los británicos en un hotel para mostrar su rechazo a estos intentos de normalizar la ocupación y para denunciar el Internamiento y las políticas de acoso y represión contra la comunidad republicana.
Algunas fotos:
- La R.N.U. elige nuevo presidente nacional tras la represión británica al anteriormente elegido en el último congreso
John Heaney es la persona elegida para ocupar el puesto recientemente vacante tras el arresto y detención del anterior presidente tras apenas unos días en su puesto. Ex prisonero de guerra en los H Blocks y veterano republicano, es originario de la ciudad de Armagh.
- Se publica una carta del presidente del 32CSM, Francie Mackey, en el "Irish News", periódico nacionalista, denunciando la policía política de los británicos
En la misma, aparte de denunciar el carácter colonial y político de la PSNI, denuncia la evidente impunidad de los crímenes que sus miembros y otros a su amparo (y el de las autoridades británicas)han cometido no solo contra Voluntarios del IRA y activistas políticos Republicanos sino contra irlandeses sin ninguna relación con la política en forma alguna y cuyo delito era el de ser irlandeses
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